ENTREVISTA DEL MES:
JORGE AWAD
Aunque es conocido por sus múltiples vínculos con la empresa privada, por algo encabeza el ranking de los hombres con más directorios de Chile -más de 40 a la fecha-, Jorge Awad tiene una antigua vocación por el servicio público, que empezó en la década de los ’60 motivada por su admiración y cercanía con el entonces presidente de la República, Eduardo Frei Montalva. En ese momento se vincula con la Democracia Cristiana y paralelamente, forma parte de un importante movimiento universitario que nace en las aulas de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile.
Fueron esos años, los que pasó como alumno en nuestra escuela, los que en gran parte marcaron y definieron su vida futura. “Fue una época muy buena, con grandes profesores. Eran todos personajes muy relevantes y dedicados a la universidad. Soy admirador de lo que me tocó ver en esta Facultad, con decanos tan notables como Sergio Molina y Edgardo Boeninger”, comentó.
Todos ellos personajes con quienes de alguna u otra manera ha seguido en contacto trabajando juntos en más de una ocasión. De cualquier forma, ya en ese entonces destacaba por su carisma y gozaba de gran simpatía en la universidad, lo que lo llevó a ser elegido como el Mejor Compañero de la Promoción, en 1967.
Empezó a trabajar a los 22 años. Dada su fuerte inclinación por el mundo público lo hizo en una institución del Estado, en la entonces denominada Dirinco (Dirección de Industria y Comercio), donde partió como asesor y luego pasó a ser director. Otro personaje importante en su vida fue el Cardenal Raúl Silva Henríquez, con quien tuvo una estrecha amistad. Es este nexo el que lo llevó a formar parte de la Universidad Católica, donde permaneció durante cuatro años, primero como director general y luego como vicerrector.
Luego, ya en la década de los 90 y tras años de trabajo incansable en diversas organizaciones del sector público y privado, su carrera como director no paró, participando –por sólo nombrar algunos- en los directorios de de Televisión Nacional, Codelco, Telex Chile, Laboratorios Chile, e instituciones y fundaciones como Icare y ProHumana. Entre los directorios más importantes está el del Banco de Chile, donde actualmente es el miembro más antiguo.
Jorge Awad también es el actual Presidente del Directorio de Lan, empresa en la que permanece desde 1994 y que se ha convertido en un importante referente para los inversionistas extranjeros y locales pues sus acciones han estado constantemente en los portafolios de recomendación de las distintas corredoras de bolsa alcanzado una de las mayores rentabilidades del 2007. La compañía también destaca por su alto potencial de crecimiento, la exitosa implementación de un nuevo modelo de negocios y un atractivo plan de inversión.
Hoy, tras 40 años de trabajo y logros profesionales, Jorge Awad se declara un hombre satisfecho con la vida y un gran amante de su familia, que cree firmemente en la premisa de "cuando se quiere se puede", y en la importante responsabilidad que tiene el sector privado ante la comunidad y su ingerencia en la superación de la pobreza.
¿Qué lo mantiene ligado a la Facultad de Economía y Negocios después de tantos años?
A mí la Facultad me formó y me siento muy ligado a esta escuela porque me dio no sólo grandes conocimientos gracias a los excelentes profesores que tuve, también me entregó una red de amigos que mantengo hasta el día de hoy. De una u otra manera siempre he estado ligado a la Facultad, ya sea como alumno, ayudante, profesor y como miembro de la Asociación de Egresados, porque creo que es una responsabilidad que tengo. En ese sentido, creo que una de las cosas importantes que hemos logrado como Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile es que realmente se forme una red permanente y de alto contacto entre los egresados. Yo nunca he dejado de participar en las actividades que me ha pedido la Facultad, como fue el caso de la inauguración del nuevo edificio TecnoAulas y la ceremonia del inicio oficial del Año Académico 2007.
¿Cuáles son los recuerdos de su época como estudiante en nuestra Facultad?
Esa es una historia muy bonita, porque durante los cinco años de carrera fui delegado de curso, después me eligieron mejor compañero y también fui vicepresidente del centro de alumnos. Mantuve una actividad académica y profesional permanente. Empecé a trabajar de manera intensa cuando era muy joven y en cargos importantes. Todo eso es un proceso que parte en la calidad de la Facultad. Son todos muy buenos recuerdos de amigos y de profesores, por eso la vinculación se mantiene. Creo que ésta es una escuela muy inclusiva, porque nuestra Facultad desde siempre ha sido un lugar al que llega gente de distintos mundos donde todos han podido convivir y en el cual se destaca la personalidad y la capacidad, más que elementos de adorno.
¿Que valor le gustaría inculcarles a los alumnos de FEN?
Que tengan vocación. Es natural decirles que tienen todas las capacidades, para llegar a esta Facultad no hay duda respecto a su inteligencia ni de lo que son capaces. La gran pregunta es si les gusta, porque tú puedes ver personas con toda la inteligencia y las oportunidades, pero les falla la vocación y la motivación. En mi caso, yo te puedo contar que cuando postulé, la única opción que puse para estudiar fue en la Facultad de Economía de la Universidad de Chile.
¿Cual ha sido su mayor desafió profesional?
Luego de pasar el período de desarrollo inicial de la profesión, el mayor desafió es mantener la confiabilidad a lo largo del tiempo. Reconozco que eso me ha hecho posible tener una tarea muy grata profesionalmente. Más que saber, ser confiable es el elemento que me ha permitido estar vigente durante 40 años.
¿Qué es para usted el éxito?
El éxito es una palabra aspirada pero muy difícil de definir y comprobar. Pero cuando logras que las personas del entorno reconozcan que estás haciendo las cosas bien y creas un sentimiento de agrado y felicidad en el resto, yo creo que uno ha tenido éxito.
Y a usted ¿que lo hace feliz?
Uno siempre tiene el deseo de que los seres más queridos, partiendo por la familia, logren lo que uno quisiera que ellos fueran. Pero puede pasar que los deseos de uno no sean los de los demás, pero si lo hacen bien, eso me hace sentir inmensamente feliz.
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