ENTREVISTA DEL MES: GABRIELA VALENZUELA, DIRECTORA DE NEXO RESPONSABILIDAD UNIVERSITARIA

La unidad de Nexo Responsabilidad Universitaria (NexoRSU) prepara su lanzamiento oficial para agosto de este año. Se conformaron en 2010 y van camino a su consolidación y, si bien el proyecto comenzó enfocado en el voluntariado y los proyectos estudiantiles, hoy ya están promoviendo la innovación docente en el curriculum para que los cursos sean más prácticos y cercanos a la realidad social de Chile. Un ejemplo son los ramos con la metodología de aprendizaje y servicio, donde los estudiantes trabajan codo a codo con los microempresarios. Conversamos con la directora del área y egresada de FEN, Gabriela Valenzuela, para conocer su trabajo y los desafíos que vienen.

¿Cómo surgió NexoRSU?
El proyecto comenzó en julio de 2009 bajo el nombre de NexoSocial. En ese momento el objetivo era promover el voluntariado y hacerse cargo de los proyectos estudiantiles. A medida que íbamos avanzando nos dimos cuenta de que si solo era una actividad extracurricular y no se vinculaba al currículum ni al proceso de formación, iba a perder sentido y no iba a generar un cambio en los estudiantes que finalmente se traduzca en ciudadanos que aporten al desarrollo sostenible.
Entonces comenzamos a mirar qué se estaba haciendo con respecto a este tema en otros países y descubrimos que detrás había una estructura mayor y que era un espacio de formación institucional. Así conocimos el concepto de Responsabilidad Social Universitaria, que además era parte de la gestión de las universidades, pues si a los estudiantes les enseñas sobre ética, o a ser ciudadanos activos, no puedes como institución comportarte de otra manera. Entendimos que teníamos que ampliar nuestro quehacer y en 2010 cambiamos el nombre a NexoRSU.

¿Cómo resumirías este año de trabajo?
Ha significado bastante trabajo, pero ha sido muy bueno. Por parte de los estudiantes el tema ha tenido muy buena acogida. Cuando conversas con ellos, dicen que la Facultad está mucho más cercana a la realidad social del país, ya que se enfrentan a casos reales desde segundo año y esa es una innovación. Por eso es importante para nosotros este lanzamiento, porque tenemos la posibilidad única de involucrar a todos los estudiantes, mostrándoles cuáles son las alternativas para que puedan participar.
Los profesores se han ido integrando e incorporando la metodología de Aprendizaje y Servicios en diferentes cursos. El año pasado comenzamos con tres profesores en los ramos de Marketing III, Fundamentos de Costos, y la Clínica de Microempresa, que además trabajan directamente con la Red de Excelencia Docente de la Universidad de Chile. En 2010 participaron 56 empresas y más de 120 estudiantes. Desde entonces se han sumado más profesores, por lo que estamos trabajando para integrar a más empresas y ampliar la oferta de cursos.

¿Qué ha significado para los estudiantes trabajar con microempresas?

Conocer la realidad de Chile desde otro punto de vista. En general en las clases te hablan de las grandes empresas, pero trabajar con microempresarios entrega una perspectiva complementaria sobre la economía. De esta forma cuando trabajes en la organización que sea, pública o privada, tendrás una mirada distinta, por ejemplo, al negociar con tus proveedores que pueden ser microempresas. También el trabajar con microempresas te obliga a desarrollar otras competencias como el compromiso, la responsabilidad de trabajar con un caso real y por sobre todo habilidades sociales o interpersonales.
Además se rompen mitos. Siempre se dice que si trabajas en una fundación o una ONG vas a ganar menos, sin embargo, este sector se ha dado cuenta de que nuestros egresados sí quieren trabajar ahí, y muchos de ellos hoy ganan lo mismo que sus pares que trabajan en grandes empresas. Estas iniciativas han abierto una nueva perspectiva, y eso lo compruebas en las ferias laborales, donde cada vez hay más presencia de fundaciones y otro tipo de organizaciones.

¿Cuál ha sido la mayor sorpresa en este proceso?
Este año, cuando participamos de las Jornadas Nacionales de Ingeniería Comercial, cambiamos el criterio de selección de los estudiantes que participarían. Los años anteriores solo habíamos enviado a los mejores promedios, pero este año cambiamos el foco y seleccionamos a quienes hubieran participado de proyectos estudiantiles u otros, ya que aportan mucho al desarrollo del estudiante en otras áreas. ¡Y ganamos! Eso validó que estas características son muy importantes. Por eso, vamos a dar un gran salto y vamos a incorporar estos proyectos al currículum, tal como lo hacen las grandes universidades del mundo.

¿Cuáles son los planes a futuro?
Según el marco de RSU debemos trabajar en cuatro áreas: extensión, docencia, investigación y gestión. El mediano plazo es fortalecer la gestión y todo lo relativo al campus sustentable. Este año se formó el Comité de Campus Sustentable FEN en el cual participan profesores, alumnos y funcionarios y se organizaron las iniciativas aisladas que ya se estaban realizando en FEN para tener una agenda común. También tenemos en carpeta trabajar más el área de investigación. Si vemos en qué hemos avanzado, vemos que estamos en deuda con la investigación, así que queremos dedicarle más tiempo y esfuerzos. También nos gustaría poder reportar bajo los parámetros de responsabilidad social, incluir el tema ambiental y social, para complementar la información que hoy se entrega, que es más bien económica. Con el tiempo se ve que estas iniciativas van permeando a toda la Facultad. Los centros de estudiantes están pensando dejar de tener departamentos sociales para tener departamentos de Responsabilidad Social. Otras facultades, al ver lo que hacemos, también se han ido sumando.